Cada año, el 31 de mayo, desde 1988, la OMS y otras asociaciones del mundo celebran el Día Mundial Sin Tabaco, que se representa con un cenicero y una rosa. En este día se pretende lograr en los fumadores del mundo 24 horas de abstinencia de todas las formas de consumo de tabaco, centrar la atención sobre el problema y los riesgos que representa el consumo de tabaco para la salud pública y propiciar políticas para reducir el hábito de fumar de forma eficaz.